CONSEJOS PARA LA DIETA DE UN LUCHADOR: Cuando se habla de la nutrición perfecta para un atleta de MMA puede significar un millón de cosas diferentes, todo dependerá de la situación que el atleta esté atravesando y qué tan cerca esté de su próxima pelea.
El estilo de alimentación no es el mismo para el atleta que se encuentra en una pretemporada, en la preparación específica para su pelea o en las últimas instancias cuando tiene que disminuir peso.
Para los atletas de lucha, la dieta juega un rol vital debido al alto gasto calórico por las largas y extenuantes sesiones de entrenamiento, se debe consumir alimentos basados en una delicada selección, determinada por la etapa del ateta para cubrir sus necesidades.
los consejos más importantes al hacer alguna dieta:
1.- Comer constantemente
Con un tiempo de 2 o 3 horas entre comida, en función de la genética del peleador y sus objetivos. Considerando también la genética del mismo, uno de genética ectomorfa (con tendencia a ser delgado) deberá comer aproximadamente cada 2 horas, mientras que un mesomorfo (huesos anchos y tendencia a la obesidad) deberá dejar un espacio de tiempo más amplio, pues su metabolismo es más lento.
Cabe resaltar que a mayor cantidad de ejercicios aeróbicos menos será el tiempo entre comidas. Si se busca ganar algo de grasa o disminuirla variará la frecuencia entre comidas también.
2.- Ingerir mucho líquido
Es un consejo tan sencillo como vital, algo básico cuando haces cualquier entrenamiento. La deshidratación provoca un bajo rendimiento y pérdida de fuerza, con las consecuencias fatales que conlleva para el ejercicio a ejecutar.
Agua natural, batidos de fruta, batidos de verduras y bebidas con sales minerales son indispensables para todo luchador. Dependiendo de la época del año en la que se encuentre y la temperatura, es necesario beber entre 2 y 4 litros diarios.
Hay que evitar a toda costa los zumos procesados, refrescos y bebidas energéticas; pues llevan gran cantidad de conservantes y azúcares que no son de ninguna ayuda.
3.- Consumir hidratos complejos
Lo que son pastas, arroz, patatas, frutas y verduras. Estos son una gran fuente de energía necesaria para los entrenamientos. Así, una buena comida antes de ejecutar un intenso ejercicio sería un plato de pasta 2 horas antes.
Estos hidratos se consumen más lentamente y, por ende, nos aportan energía durante un periodo más largo. Consumirlos solo al principio y mitad del día, debido a que cuando llega la noche es recomendable evitar pastas, arroces y papas; pues nuestra actividad es menor y el consumo de energía que realizamos también, por lo que se almacenarán en forma de grasas los hidratos de carbono no utilizados.
4.- Programar el consumo de proteínas
Lo indicado sería entre 2.5 y 3.5 gramos de proteínas por kilogramo peso. En otras palabras, si posee un peso de 80 kilos, correspondería consumir alrededor de 240 gramos de proteínas (80 kg x 3 gramos prot. = 240) distribuidos de igual manera entre todas las comidas para su mejor asimilación.
Si realiza 6 comidas, por ejemplo, son 40 gramos de proteínas en cada una. Cuando se desarrollan ejercicios intensos, se rompen fibras musculares y tejidos, por lo que las proteínas son esenciales para la reparación de éstos. Es por ello que son especialmente importantes durante y después de entrenar.
5.- Comer grasas no saturadas
No hamburguesa, pizza o papas fritas. Con grasas saturadas se hace referencia a las que provienen de los frutos secos, del aceite de oliva sin hervir, crema de cacahuate y otras muy buenas que son los ácidos grasos omega 3, que se pueden encontrar en algunos pescados como lo son el atún, salmón o caballa.
Que, además, ayudan a reducir la inflamación de articulaciones y músculos. Una cena ideal sería un filete de 200 gramos de salmón con verduras al vapor, dado que proporcionan muchas proteínas, ácidos grasos y pocos hidratos de carbono.